
La bancada de diputados del Frente Amplio reveló este sábado un plan de reasignaciones presupuestales por unos $ 500 millones, que se pondrá sobre la mesa al momento de la votación final del proyecto de presupuesto.
La propuesta fue anunciada en una conferencia de prensa encabezada por la diputada Ana Olivera, quien señaló que “jamás el Presupuesto sale como entra a la Cámara” y adelantó que los ajustes estarán dirigidos a sectores como educación, ciencia, justicia y salud.
Según lo planteado por el FA:
- De los $500 millones, $290 millones serían destinados a la Universidad de la República (Udelar) para planes de descentralización, becas y mayor dedicación docente.
- $60 millones de ese monto se asignarían específicamente al Hospital de Clínicas.
- $80 millones para la Universidad Tecnológica (UTEC), orientados a consolidar su oferta educativa y otorgar becas.
- $24 millones para fortalecer parques tecnológicos en Pando y Rivera, así como apoyos a institutos como Clemente Estable y alfabetización en cárceles.
- También se propone destinar $40 millones para equiparar los salarios de los fiscales con los jueces, una demanda histórica dentro del ámbito judicial.
Para financiar esas reasignaciones, el FA plantea absorber fondos originalmente previstos para el pago de deuda en el área metropolitana y disminuir partidas destinadas a retribuciones personales en el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
Otra medida que busca incluir es quitar la obligación de que la Suprema Corte de Justicia (SCJ) deba pedir autorización al MEF para trasponer fondos, lo que implicaría otorgar a la Corte mayor autonomía financiera, según lo expresado por los oficialistas.
Reacciones de la oposición
El diputado nacionalista Pablo Abdala respondió inmediatamente que los ajustes anunciados son “mejoras entre comillas” y no constituyen cambios de fondo. Advirtió que no hay “un peso adicional” para la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) dentro de las reasignaciones.
Conrado Rodríguez, diputado colorado, coincidió en que algunas reasignaciones podrían tener sentido, pero que muchas resultan insuficientes ante las demandas reales de los organismos.
En materia impositiva, la Cámara de Diputados aprobó recientemente el “Impuesto Temu” y el Impuesto Mínimo Global, con el respaldo de la bancada del Frente Amplio y Cabildo Abierto. El FA argumenta que esas modificaciones tributarias buscan nivelar la competencia entre el comercio local y plataformas internacionales.
El ministro Gabriel Oddone defendió que el 80 % de los nuevos tributos tendrá impacto neutro para el contribuyente común, y negó que las reasignaciones dependan de la aprobación de esos impuestos.
Abdala sostuvo que nunca hubo “un peso adicional” incluido para ANEP y que el proyecto de universalización de la educación inicial, así como los cargos para educación especial, quedan relegados en este esquema presupuestal.
Contexto político y peso simbólico
El anuncio se produce justo después de la aprobación impositiva (Impuesto Temu e Impuesto Mínimo Global) y busca mostrar voluntad de ajuste por parte del oficialismo. Sin embargo, la crítica general es que estos movimientos se interpretan más como gestos simbólicos que soluciones estructurales.
La idea de reasignar recursos entre partidas es habitual en negociaciones presupuestales, pero en este caso ha despertado debate por la magnitud del monto ($500 millones) y la focalización elegida: grandes actores del sistema universitario, instituciones de ciencia y salud, y el sistema judicial.
Las tensiones internas entre los partidos de oposición —sobre todo el Partido Nacional— respecto a qué aceptar o rechazar serán decisivas en la votación final del presupuesto. El FA necesita que esos cambios sean aprobados para congregar apoyos y legitimar el proyecto ante su base electoral.
En definitiva, el Frente Amplio busca reproducir una narrativa de gestión responsable y corrección política tras la aprobación de los nuevos impuestos, mientras que la oposición continúa demandando transformaciones más sustanciales en educación y otros sectores clave.