
La Comunidad Israelita de Punta del Este, CIPEMU, emitió un comunicado en el que celebra la liberación reciente de rehenes y destaca el retorno a la paz, agradeciendo el apoyo internacional, en particular del gobierno de Estados Unidos y del presidente Donald Trump, así como el esfuerzo y coraje del Estado de Israel. El pronunciamiento subraya la relevancia de la solidaridad global, señalando que casi todos los países del mundo han contribuido a este logro humanitario.
El comunicado refleja la profunda preocupación de la comunidad por los episodios de violencia y terrorismo que han afectado históricamente a la región. “Este momento representa un anhelo compartido por toda nuestra comunidad: el deseo sincero de que la paz prevalezca y se consolide, de que nunca más tengamos que vivir episodios de violencia salvaje, ni de terrorismo que conduzcan a guerras, y que las familias puedan reencontrarse en libertad y seguridad”, señala CIPEMU.
Además, la Comunidad Israelita enfatiza la importancia de la reconstrucción de Gaza, no solo en términos materiales sino también en el plano espiritual. Según el comunicado, la reconstrucción física debe ir acompañada de un renacimiento social basado en principios democráticos, libertad, respeto por la vida propia y del prójimo, y el reconocimiento explícito del derecho a la existencia del Estado de Israel. Este enfoque busca garantizar que los procesos de recuperación promuevan la convivencia pacífica y el fortalecimiento de valores humanos universales.
A pesar de la distancia geográfica que separa a la comunidad de Punta del Este de los acontecimientos en Oriente Medio, CIPEMU asegura mantener una conexión profunda con la situación, manifestando esperanza, solidaridad y un firme compromiso con los valores humanos esenciales. La comunidad considera que la reciente liberación de rehenes y la cooperación internacional que la hizo posible representan un hito importante que debe inspirar un camino duradero hacia la paz.
El comunicado finaliza con un llamado a la humanidad y a la empatía, instando a que las diferencias políticas, culturales o religiosas no obstaculicen la preservación de la vida y los derechos fundamentales de las personas. CIPEMU expresa su confianza en que esta situación recién alcanzada sea el inicio de un proceso en el que la humanidad, la empatía y el respeto mutuo se antepongan a cualquier conflicto, consolidando un futuro más seguro y pacífico para todas las sociedades involucradas.