Femicidio

Este jueves inició el juicio por el femicidio de Valentina Cancela

En un clima de solemnidad y pesar, este jueves comenzó el juicio por el femicidio de Valentina Cancela, la joven de 17 años cuya vida fue truncada por su novio en un trágico suceso ocurrido el 16 de agosto de 2023. La instancia judicial se lleva a cabo en un juzgado de la ciudad de San Carlos, Maldonado, en la esquina de Leonardo Olivera y 25 de Agosto.

La jornada inaugural del juicio fue anticipada por el abogado de la familia de la víctima, Martín Etcheverry, quien señaló que se espera que la audiencia requiera al menos tres días, dado que más de 40 testigos están llamados a declarar. La magnitud de las evidencias presentadas será significativa, incluyendo audios, videos, testimonios de técnicos, peritos forenses y agentes de policía, así como la revisión de las escenas relacionadas con el hallazgo del cuerpo de Valentina.

En una rueda de prensa previa al juicio, Etcheverry destacó el trabajo de la Fiscalía, expresando confianza en la capacidad de demostrar los elementos necesarios para respaldar la acusación. El abogado indicó que se abordarán aspectos como la calidad de menor del acusado y su confesión del crimen, buscando contrarrestar posibles defensas basadas en estos puntos.

El dilema central en el juicio, según Etcheverry, radica en la solicitud de pena. Mientras el fiscal Jorge Vaz busca la máxima pena posible, 10 años de prisión, el abogado de la familia aspira a que se impongan 9 años y 11 meses, considerando al agresor como un primario. Este último se encuentra en una dependencia del Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente (Inisa) como medida preventiva.

La trascendencia nacional de este caso se intensificó debido a las denuncias previas de maltrato, que la familia de Valentina aseguró haber presentado, y a las declaraciones del entonces ministro del Interior, Luis Alberto Heber, quien señaló que «había fallado el sistema».

Durante los próximos días, la sede judicial especializada en violencia de género será testigo de un juicio que busca impartir justicia en un caso que ha conmovido a la sociedad uruguaya, generando reflexiones sobre la efectividad de los mecanismos de protección y prevención en casos de violencia de género.

Foto: Ricardo Figueredo/El País

Tras resistirse al arresto, la policía ejecutó al femicida de Martínez Báez

Fue abatido por la policía el asesino de Katherine Tatiana Martínez Báez en el barrio San Martín

El hombre era buscado intensamente por la policía tras el femicidio de su pareja y se lo localizó en una finca en la calle Joaquín Artigas del barrio San Martín. Cuando lo fueron a detener se resistió, hiriendo a un agente con un cuchillo y los policías reaccionaron ultimando al asesino. El hecho ocurrió frente al Liceo 6 en el barrio San Martín.

El cuerpo de Katherine Tatiana Martínez Báez, de 29 años, había sido ubicado en una vivienda sita en Román Guerra y Hernandarias, en el barrio Lavalleja, tras la denuncia de una vecina que en la madrugada sintió gritos y no vio a la mujer en la pasada jornada jornada, por lo que resolvió dar cuenta a la policía, la que encontró el cuerpo sin vida. Médicos que concurrieron al lugar certificaron su deceso. Había sido golpeada y también apuñalada varias veces.

El departamento de Homicidios y Delitos Complejos de la jefatura trabajó en procura de la detención de Francisco Nicolás Araujo Sánchez, de 35 años, hasta que esta madrugada de martes fue ubicado en la zona mencionada.

En el lugar se hizo presente el propio jefe de Policía de Maldonado, Erode Ruíz y otros jerarcas del comando junto a otras autoridades.

Previo a esto un grupo de personas a través de las redes sociales están convocando para una marcha a cumplirse este martes a partir de la hora 18 que partirá desde la plaza del barrio Norte hasta la plaza San Fernando, con concentración frente a la Jefatura de Policía de Maldonado. Frente a este hecho de la madrugada se desconoce si sigue en píe la convocatoria.

Fiscalía solicitó pena máxima por femicidio de Valentina Cancela

La Fiscalía ha presentado una solicitud de pena máxima en el caso del femicidio de Valentina Cancela, una joven de 17 años. El fiscal de San Carlos, Maldonado, Jorge Vaz, ha solicitado una pena de diez años de privación de libertad como medida socioeducativa en el Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente (Inisa). Este período representa el límite máximo permitido para la privación de libertad de un menor de edad.

La infracción cometida está tipificada en la ley penal como un delito de homicidio muy especialmente agravado por femicidio. El exnovio de Valentina, también de 17 años, fue ingresado al Inisa el pasado 18 de agosto como medida cautelar, a la espera de que se confirme la sentencia. Según las autoridades, este caso se está manejando de manera diferente debido a la necesidad de evaluar al joven y su proceso de adaptación antes de ingresar al centro cautelar.

Es importante destacar que durante la audiencia de formalización, el acusado no expresó arrepentimiento en ningún momento, según una fuente del caso. La familia de Valentina ha manifestado su intención de demandar al Estado debido al manejo de la Justicia en relación con las múltiples denuncias que la joven había presentado contra el agresor. Los abogados defensores de la familia han afirmado que buscarán responsabilizar al Estado por el femicidio de Valentina y esperan que este caso sirva como un llamado de atención para evitar errores graves en el sistema de justicia y protección de víctimas de violencia de género. El ministro del Interior, Luis Alberto Heber, también ha reconocido que el sistema falló en este caso, ya que a pesar de las denuncias previas, no se tomaron las medidas necesarias para proteger a Valentina, lo que resultó en una tragedia lamentable. Este caso ha generado un debate público sobre la necesidad de mejorar los protocolos de actuación y la respuesta del sistema de justicia en casos de violencia de género y femicidio en Uruguay.

Femicidios en Uruguay: Una realidad alarmante que requiere acción inmediata

Por: Daniel Sosa

En los últimos años, Uruguay ha enfrentado una creciente y preocupante ola de femicidios, revelando una realidad sombría que exige una respuesta decidida por parte de la sociedad y las autoridades. Los femicidios, actos violentos que resultan en la muerte de mujeres a manos de hombres debido a su género, han generado profunda consternación y desafían el compromiso del país con la igualdad de género y la seguridad de las mujeres.

Según datos alarmantes proporcionados por el Observatorio de Igualdad de Género en América Latina de la CEPAL, Uruguay lidera en la tasa de mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas cada 100,000 habitantes en la región iberoamericana. Esta situación exige una reflexión profunda sobre las causas subyacentes y la necesidad de una acción integral para prevenir y abordar la violencia de género.

Una cifra impactante es que el 99% de los femicidios son perpetrados por hombres mayores de edad. Esta estadística desgarradora subraya la urgente necesidad de comprender y abordar las actitudes y comportamientos tóxicos arraigados en ciertos segmentos de la población. Además, es desconcertante saber que, en promedio, los femicidas en Uruguay enfrentan penas de apenas 4 años de cárcel, lo que cuestiona la efectividad de la respuesta legal ante este grave problema.

Es importante mencionar que el llamado «no a la baja» de las penas, defendido por figuras políticas de diferentes partidos, ha generado debates intensos, pero es crucial tener en cuenta que la pena máxima para menores de entre 15 y 18 años sigue siendo de 10 años, y en muchos casos, ni siquiera se otorgan penas tan severas a los adultos. Es esencial que la lucha contra la violencia de género no se politice, y que se trabaje en conjunto para lograr un cambio real y sostenible en la sociedad.

Las cifras hablan por sí mismas

Más de 1 millón de mujeres uruguayas han experimentado situaciones de violencia basada en género en algún momento de sus vidas, y aproximadamente 640,000 uruguayas han sufrido violencia por parte de sus parejas o exparejas. El alcance de este problema es abrumador y pone de manifiesto la necesidad de un enfoque integral para prevenir y abordar la violencia de género en todas sus formas.

Las disparidades entre áreas metropolitanas y localidades más pequeñas son inquietantes. El 84.2% de las mujeres en el área metropolitana reportan haber experimentado violencia basada en género en algún ámbito, mientras que, en localidades con menos de 5000 habitantes, esta cifra asciende a un alarmante 60.3%. Estas estadísticas resaltan la necesidad de enfoques específicos según la ubicación y las circunstancias individuales.

La violencia de género es una realidad que no puede ser ignorada.

El 75.8% de las personas que denuncian violencia doméstica y delitos asociados son mujeres, mientras que el 77.9% de los agresores identificados son varones. Estas cifras subrayan la importancia de abordar las actitudes y comportamientos perjudiciales arraigados en la sociedad que perpetúan esta violencia.

En cuanto a las denuncias de género, los datos muestran un aumento constante en los últimos años. Durante el periodo de enero a junio del año 2021, se registraron 16,795 denuncias, cifra que aumentó a 18,853 en 2022 y a 19,754 en el mismo periodo de 2023. Estas cifras reflejan tanto un aumento en la conciencia pública como la urgente necesidad de fortalecer los mecanismos de prevención y apoyo a las víctimas.

La trágica estadística de feminicidios es igualmente desgarradora. En 2018, se reportaron 35 casos, disminuyendo a 25 en 2019 y 19 en 2020. Sin embargo, en 2021, los números volvieron a aumentar, registrando 25 casos, y en 2022 la cifra ascendió a 37 feminicidios. Además, es importante resaltar que en el contexto de estos feminicidios también se han perdido 8 niñas, niños y adolescentes, una devastadora manifestación de la profundidad del problema.

En lo que va del año 2023, se han producido 13 feminicidios y 9 intentos de feminicidios, según datos proporcionados por el proyecto Feminicidio Uruguay. Estas cifras subrayan la continua urgencia de la situación y resaltan la necesidad de tomar medidas concretas y efectivas para prevenir y abordar la violencia de género en todas sus formas.

Es fundamental que la sociedad uruguaya se una en un esfuerzo colectivo para abordar esta grave problemática. La violencia de género es un tema complejo y arraigado en actitudes y estructuras profundamente arraigadas, pero no es insuperable. Para lograr un cambio significativo, es esencial implementar estrategias integrales que incluyan educación, sensibilización, apoyo a las víctimas y reformas legales efectivas.

En resumen, los femicidios en Uruguay son un problema alarmante y urgente que requiere la atención y acción de todos los sectores de la sociedad. Es esencial dejar de lado las diferencias políticas y trabajar juntos para crear un entorno seguro y equitativo para todas las personas, independientemente de su género. La prevención y abordaje de la violencia de género deben ser prioridades claras, con el objetivo de proteger la vida y dignidad de las mujeres uruguayas.