Suspendieron la sesión de Junta Departamental de Maldonado por incidentes de intolerancia
En la noche de este martes, la sesión de la Junta Departamental de Maldonado se vio interrumpida debido a un episodio de intolerancia y manifestaciones inapropiadas por parte de algunos asistentes en la barra. El presidente de la Junta, Darwin Correa, explicó en una entrevista concedida a este medio que la situación lamentablemente llevó a la suspensión de la sesión, dejando varios expedientes pendientes de terceros sin tratar.
El conflicto se originó cuando algunas personas en la barra comenzaron a manifestarse y a interrumpir la sesión mientras una edil estaba tomando la palabra. Según Correa, la manifestación estaba relacionada con una consigna en contra del silenciamiento de voces, representada por remeras alusivas que portaban algunas de las asistentes.
El presidente de la Junta destacó que el reglamento de la institución no permite ninguna forma de manifestación, ya sea a favor o en contra, mientras alguien esté hablando. Además, señaló que el reglamento se aplica de manera equitativa, sin distinción de género, y que las normas son claras al respecto.
Correa también hizo hincapié en que el incidente fue un ejemplo de intolerancia y falta de respeto hacia el funcionamiento democrático y las reglas establecidas. Mencionó que se les pidió a las personas que se retiraran de la barra para que la sesión pudiera continuar, pero algunas se resistieron y entraron en desacato, lo que finalmente llevó a la suspensión de la sesión según lo previsto en el reglamento.
El presidente de la Junta Departamental destacó la importancia de respetar el reglamento y las normas que rigen el funcionamiento de la institución. Hizo hincapié en que el reglamento no hace distinción de género y que es necesario acatarlo para garantizar un ambiente de respeto y orden en la toma de decisiones.
Este incidente ha generado un debate sobre el respeto a las reglas de convivencia y el papel de la ciudadanía en el proceso democrático local. La bancada del Partido Nacional emitió una carta pública en apoyo a la presidencia de la Junta y en llamado a evitar futuras situaciones similares.
¿Qué sucedió este martes en la Junta Departamental de Maldonado?
La verdad que fue un acto muy triste sobre todo por lo que marca la intolerancia de alguna parte del sistema político, en este caso del departamento de Maldonado. Creemos nosotros, mal copiando de otros sistemas políticos de algún otro lado que no es el propio nuestro, porque si hay un sistema tolerante y democrático, es el de nuestra república, es el de Maldonado. Anoche tuvimos que suspender la sesión, lamentablemente, quedando para atrás varios expedientes de terceros, de personas que querían regularizar sus casas, sus obras para poder seguir con los trámites, etcétera. Creemos que fue un episodio muy triste, donde lamentablemente las barras, o sea, para que la gente entienda el lugar donde cualquier ciudadano del departamento puede ir a escuchar, a seguir una sesión, a ver cómo funciona el sistema democrático y también a presenciarla, se manifestaron empezaron primero que nada con una manifestación a partir de lo que una señora edil estaba comenzando a hablar, que también, como lo decimos siempre, ni el reglamento ni el presidente de la junta, en este caso, hablan y entienden nada de género, sino que este reglamento no distingue entre lo que es género o no, entonces tenemos que aplicar de la misma manera el reglamento para hombres que para mujeres. Pero bueno, lamentablemente, el Frente Amplio no lo han entendido así. Anoche en la barra había 12 mujeres, de 12 señoras, con remeras alusivas a una consigna que decían “No nos callamos más” o “No nos callan más”, algo así. Una remera que ya se veía, la hemos visto en otras manifestaciones de color violeta, a lo que el reglamento en el artículo 117 lo dice expresamente, que está prohibido cualquier tipo de manifestación a favor o en contra de cualquiera de los que estén hablando.
¿Entiende que lo ocurrido ayer es correlativo a los reclamos de ediles del Frente Amplio por una supuesta violencia ejercida en el uso de la palabra dentro del deliberativo departamental?
Sí, claro, porque se le aplicaba el reglamento. El artículo 74, 75, 85 y 94 y 95 de la Junta Departamental habla claramente de qué manera se tienen que conducir los señores ediles y cuál es la obligación del presidente en la forma de que se conduzcan los señores ediles. En el uso de la palabra, los curules pueden aludir a otra persona, pueden nombrar a otro señor edil y no hay problema ¿Por qué?, Porque el uso de la palabra el otro señor edil tiene derecho, si se siente aludido, a pedir la palabra por alusión y poder responderle o pedir interrupción y poder responderle. Pero usted cuando fundamenta su voto no puede aludir. ¿Por qué? Porque el otro no le puede responder. Pero si usted alude, es una actitud cobarde y lo dice expresamente el reglamento. Y en el presidente tiene que llamar la atención cuando usted alude en el momento de la fundamentación. Y eso no distingue, se dice, no dice en el reglamento, si es mujer puede aludir y si es hombre no puede aludir, no lo distingue el reglamento eso. Es una cuestión que yo no me lo tomo por personal, porque es una cuestión organizada, quedó claro, vinieron manifestante de Montevideo, dentro de las 12 que había. Eran, no sé, tres o cuatro, eran de la capital del país, entre ellas la ex-edil Colorado y después edil del Frente Amplio Glenda Rondán, que fuera que llevó la voz cantante. Y bueno, con mucho respeto, como corresponde, como corresponde cualquier ciudadano de nuestro país, de nuestro departamento, nos conducimos a ellas y lamentablemente de un lado hubo respeto, del otro lado hubo intolerancia. Y así fue que, lamentablemente, quedaron para atrás expedientes importantes a tratar en la noche de ayer.
¿En qué momento de la sesión se dio este hecho? ¿Habían alcanzado a hacer las exposiciones los partidos o fue previo a ello?
No, era justo el momento de la exposición de los partidos políticos. O sea, se había pasado la media hora previa. Estábamos en los partidos políticos, donde el Frente Amplio estaba haciendo uso de la palabra, a través de su edil, Hernández. Y bueno, fue en ese momento cuando comenzó este episodio. Porque, además, después cuando pedimos el desalojo de la barra para poder continuar con la sesión, la señora seguía, se resistieron a retirarse, entraron en desacato y se quedaron paradas ahí de manera incorrecta y anti-reglamentaria. Entonces, se prosiguió a la suspensión de la sesión como lo marca el reglamento, porque acá hay que tener claro algo, todo lo marca el reglamento. Tenemos la obligación de respetar el reglamento. Porque si no sería todo arbitrario, según el que esté, se hace un reglamento, se hace un chicle el reglamento. Y no, el reglamento está para… ser respetado porque es lo que nos da garantías a todos, nos guste o no nos guste. Y en eso nadie nos va a torcer ese tipo de situaciones, porque así es y así tiene que ser.
El reglamento no distingue de géneros, porque así debe de ser, porque ni la Constitución lo hace y el reglamento de la junta mucho menos. Y el presidente de la Junta debe ajustar ese reglamento y tampoco distingue de géneros, porque no correspondería casi fuera.
Darwin Correa – Pte Junta Departamental de Maldonado